Tanza Varela: "No soy una revoltosa sin pega"
La nueva "niña terrible" del espectáculo cuenta lo que le ha dolido, lo que ha aprendido y lo que nunca soportará en televisión.
Con ese estilo directo, que va al choque, Tanza Varela se ha ganado un espacio en la televisión. Con esa misma transparencia que la convirtió en la revelación del reality de Año 0, de Canal 13, ahora es parte del jurado del nuevo programa de talentos de TVN, El Experimento, junto a Ricarte Soto y Alvaro Escobar.
La joven de 22 años quiere hacer una carrera en televisión. Y a El Experimento se suman dos producciones vía web: Twitland y Me gustas, que partieron el lunes 26 de septiembre en la señal de PeakTV (www.peaktv.cl). Aunque Varela ha ocupado igual tiempo en pantalla debido a las reacciones que provoca su personalidad. Como sus enfrentamientos con otras figuras juveniles. O el episodio donde se sacó la corona sobre el escenario de las Fiestas Patrias en Colina para ponérsela a la metereóloga Allison Göhler, en medio de una pifiadera que podrían haber derribado a muchas otras. Menos a ella.
"Obvio que me duele que me pifien, no es algo bueno, pero son cosas que no puedo evitar", responde la actriz, que ahora busca mayor independencia. Por eso se cambió a un departamento en Vicuña Mackenna, lejos de su madre, con quien vivía.
¿De dónde saca fuerza para resistir tanta pelea?
La verdad es que no sé de dónde, porque no es fácil. Cuando tengo momentos difíciles me refugio en mis pensamientos.
¿Es dañino el ambiente de la televisión?
Sí, mucho, suceden cosas inesperadas. Al final es un juego muy difícil, pero por un lado estoy tranquila porque estoy llena de trabajo y eso es lo más importante. No soy una revoltosa sin pega.
¿Es un juego peligroso el de las polémicas?
Claramente la farándula siempre te juega en contra, es sucio. El que se mete en esto debe tener muy claro lo que le puede pasar, hay que ser muy inteligente y ver cómo se hacen las cosas. Es una pena que el medio sea tan duro, cuando detrás de todos los rostros que están en pantalla hay familias. Ninguno se pone en el lugar de las otras personas, pero bueno, la farándula es así.
¿Cómo está su relación con Claudio Valdivia, con quien incluso ha hablado de matrimonio?
Prefiero no hablar de él. No voy a volver hablar de mis pololos, nunca más.
¿Esta es una lección que aprendió?
Más que aprender, me di cuenta que existe gente muy mala y que, por tener pantalla, está dispuesta incluso a decir que uno es prostituta. Hay que tener mucho cuidado en quien confías y con quién hablas. Nunca más voy hablar con SQP, con Intrusos o con En Portada, es algo que ya tengo muy claro. Se acabaron las estupideces, tengo mis programas en radio, web y televisión, ya no necesito de ellos.
¿Siente que lo ha hecho bien?
Sí, de todas maneras. Me he equivocado, obvio, como todo el mundo, pero tengo súper claro lo que quiero. Y lo que no quiero es hablar más de mi vida y con quien estoy.
¿Qué cosas no está dispuesta a hacer por la fama?
Vender mi vida privada, que hablen de mis hermanas o mis papás. Ellos no tienen por qué salir en televisión. Soy un perro guardián y el día que ellos sean expuestos, dejo la televisión.
No ha sido fácil su noviciado frente a las cámaras televisivas.
Ha sido duro, sobre todo cuando hay personas que se cuelgan de ti y se ponen a decir cosas muy fuertes.
¿Qué es lo más fuerte que ha escuchado?
Un tipo dijo con mucha seguridad que yo, a los 13 años, había tenido un hijo y lo había dado en adopción. Para mí el tema de los hijos es muy fuerte y no es algo que hubiese hecho... Es heavy que la gente digas cosas así, que duelen tanto. Jamás daría un hijo en adopción, porque soy de una familia muy católica.
Usted parece rebelde, pero viene de una familia bastante tradicional...
Mi familia es muy tradicional y fue donde me crié. Mi mamá sufrió mucho cuando yo era chica, porque era muy rebelde. A los 12 años me empecé a poner medio loquita.
¿Ha madurado?
Un poco... Espero que las cosas salgan bien y todo fluya. Antes salía más a carretear, ahora me acuesto temprano porque estoy con mucho trabajo. Soy una persona bastante sana. Y prefiero mil veces quedarme en la casa que salir.
Se han contado tantas historias sobre usted...
No me importa lo que digan, todos hemos cometido errores, todos tenemos algo que no queremos que nadie sepa, no soy la única... Por lo tanto, no me entran balas.
¿No hay nada en su pasado que la torture, como fotos o videos?
No, y si aparece alguna vez, aunque estoy segura que no existen, nada que hacer. A la gente le gusta ser mala y juzgar a otros. Yo no pesco, excepto esto del embarazo, que me dio pena porque es absolutamente falso.
¿Cómo planea potenciar su carrera?
Voy hacer todo de la forma más profesional posible. Quiero perfeccionarme en la actuación y más adelante estudiar periodismo o algo con las comunicaciones.
¿Por qué parece que siempre se está defendiéndose o peleando con alguien?
Yo no dejo que nadie me falte el respeto. Me llama mucho la atención que la gente, con toda lo complicada que soy, me quiera y me haya transformado en todo un personaje en Año 0. Hay muchas mujeres que me escriben y se ven reflejadas en mí. Me llena de orgullo y de amor como es la gente en la calle. No debe haber nada peor que ser odiado y a otros les pasa.